Algo tan molesto como tener las manos frías todo el tiempo es una sensación que experimentan muchas personas. A pesar de que por lo general es una reacción normal del organismo que intenta mantener la temperatura, no deja de ser incómodo. De hecho, tener las extremidades del cuerpo frías todo el tiempo aumenta la sensación de frío e incomodidad en todo el cuerpo. Según el tipo de actividades que se desempeñan en el día a día, conseguir calentarse las manos puede ser más complicado, pero hay solución. Aquí te explicamos cómo calentar las manos frías con pequeños trucos y ejercicios sencillos que puedes realizar incluso mientras trabajas en el ordenador.
Ejercicios para calentarse las manos
Moverse es la manera más efectiva para estimular la circulación sanguínea y hacer que la sangre llegue a todos los tejidos y células y caliente también manos y pies, que suelen quedarse más fríos que el resto del cuerpo cuando estamos en ambientes con bajas temperaturas.
Todo tipo de ejercicio que favorezca el bombeo de sangre nos ayudará a calentar las manos frías, en modo particular los ejercicios aeróbicos o cardio. Pero no en todo momento podemos ponernos a saltar la comba, correr, ir en bici o bailar. Para calentar las manos rápidamente podemos probar con otros ejercicios igual de eficaces. Aquí te proponemos algunos ejemplos:
- Frotar las manos: es la acción más sencilla e instintiva para calentar las manos cuando están frías. De hecho, si lo hacemos correctamente, también es efectivo. Frotando las palmas de las manos entre sí repetidamente ponemos en marcha los músculos de los brazos y las manos y activamos la circulación en esta zona. Al mismo tiempo, con la fricción sobre la piel activamos la microcirculación en los dedos, lo que contribuirá a aumentar la temperatura en esta zona.
- Ejercicios de manos y brazos: puedes hacer movimientos para activar la circulación en las extremidades y calentar las manos con ejercicios como abrir y cerrar puños, mover las manos en círculos o hacer rotaciones de brazos. Puedes realizar series de 10 y repetir 3 veces cada ejercicio. Practicar estos ejercicios no te llevará más de diez minutos y si tu trabajo te obliga a estar mucho rato en la misma postura puedes aprovechar las pausas para repetir estos movimientos sencillos y evitar que se te enfríen las manos.
- Caminata rápida: si se te enfrían las manos cuando estás caminando una estrategia sencilla para calentarte consiste en aumentar el ritmo. Verás cómo en pocos minutos te sentirás mejor y con las manos y los pies más calentitos.
- Hacer el pingüino: este ejercicio es muy sencillo y divertido y puedes proponérselo también a los más pequeños. Se trata de ponerse de pie y colocar los brazos pegados al cuerpo con las manos en ángulo recto simulando a un pingüino. Lleva los hombros arriba y abajo manteniendo los brazos pegados al cuerpo y repite varias veces. Sentirás como la sangre circula hasta las manos y poco a poco las calienta.
Trucos para mantener las manos calientes
Además de los ejercicios también puedes aprovechar algunas estrategias que favorecen una buena circulación y te ayudan a mantener las manos calientes también en invierno. ¡Toma nota!
- Tomar alimentos que favorecen la circulación: jengibre, cayena, canela y clavo de olor son ejemplos de especias ideales para el invierno, porque combinan con muchos platos y favorecen la circulación sanguínea. Además, las puedes emplear en la preparación de infusiones para activar la circulación y aumentar la sensación de bienestar en los días más fríos.
- Protegerse del frío: abrigarse en invierno es una de las claves para afrontar el clima frío. En este sentido, para mantener las manos calientes, no podemos dejar de utilizar unos guantes de lana cada vez que salimos o permanecemos en ambientes fríos.
- Utilizar saquitos térmicos: los saquitos de semillas que se calientan al microondas son perfectos para ayudarnos a mantener las manos calientes cuando pasamos muchas horas parados o en lugares fríos. Si no disponemos de microondas para calentarlos, podemos optar por almohadillas térmicas eléctricas o aquellas que se calientan en agua.
- Cuidar e hidratar la piel: mantener las manos hidratadas es un buen hábito que ayuda a evitar la sensación de frío y además contribuye a prevenir la aparición de sabañones y otros problemas asociados con el frío. Sobre todo en invierno es clave seguir algunas pautas para el cuidado de la piel.
- Mantenerse hidratados: no solo tu piel, sino que todas tus células necesitan una buena hidratación, incluso cuando hace frío. Tomar infusiones o chocolate caliente es una buena idea para mantenerse hidratados y calentarse a la vez.
- Evitar el alcohol: aunque tomar alcohol puede dar la sensación de calor en la piel en un primer momento, en realidad el alcohol tiene una acción vasodilatadora que reduce aún más la circulación en las extremidades. En definitiva, aumenta la sensación de frío en las manos.
- Masajear manos y brazos: la acción del masaje favorece la circulación y para calentar las manos más rápidamente puedes aplicar cremas o aceites de masaje con efecto calor.
¿Por qué tengo las manos siempre frías?
Tener las manos frías en invierno o cuando se permanece un tiempo en ambientes fríos es algo bastante normal y nos indica que nuestro cuerpo está trabajando para mantener la temperatura corporal adecuada.
Sin embargo, tener las manos frías cuando la temperatura exterior es agradable o que sigan frías a pesar de hacer ejercicios, abrigarse y probar otras estrategias para calentarse, puede ser un signo de algún problema de salud.
De acuerdo con las informaciones publicadas en la web Mayo Clinic, si las manos están siempre frías y presentan otros síntomas como entumecimiento, piel más gruesa o ampollas es recomendable acudir a un médico. Las manos frías, de hecho, pueden ser una señal de que algo en nuestro cuerpo no funciona bien y a menudo son un síntoma presente en enfermedades como diabetes, hipotiroidismo o anemia, entre otras, que es importante detectar con tiempo para evitar un empeoramiento de las condiciones de salud.